El cuidado de nuestros pies constituyen una cuestión importante en nuestra vida diaria ya que representan el soporte de nuestro cuerpo y nos dan la estabilidad necesaria para mantenernos en pie. Pero sobre todo los cuidados se hacen más esenciales si tenemos que trabajar de pie muchas horas. El sector sanitario representa este tipo de trabajos requiriendo a los profesionales de la salud utilizar un calzado apropiado como unos buenos zuecos sanitarios cómodos, flexibles y que se ajusten perfectamente para desarrollar su tarea sin que sus pies se vean perjudicados. Además, es importante saber que la salud de las articulaciones dependen de nuestros pies.
Mucha gente todavía no tiene en cuenta el cuidado de sus pies en su trabajo utilizando cualquier tipo de calzado provocándoles de este modo, deformidades o lesiones varias en los mismos.
Los problemas más comunes que nos podemos encontrar si no usamos un calzado adecuado son:
· Problemas de menisco
· Dolor en rodillas
· Dolor en cadera
· Dolor en columna vertebral causando lumbalgias, discopatía vertebral…
Otros problemas habituales que nos podemos encontrar, aunque menos importantes pero no por ello molestos que nos puede producir un calzado inadecuado son entre otros, durezas en la planta del pie, callos entre los dedos y los ojos de gallo. Cuando vemos que nos aparece una piel seca en nuestros pies puede ser una señal que nos indica que debemos empezar a cuidar nuestros pies. Todas estas dolencias nos pueden producir dolor dificultando nuestras tareas cotidianas como trabajar, hacer deporte, salir etc., así que es imprescindible prevenir estas dolencias e incomodidades que puedan provocar nuestro calzado.
Asimismo nuestras uñas también pueden presentar ciertas molestias como la uña encarnada, que se debe a la utilización de un calzado apretado o un corte de uñas semicircular, en lugar de hacer un corte en línea recta. Esto nos producirá enrojecimiento y dolor.
Os damos algunos consejos para conservar unos pies sanos:
· Usar un calzado adecuado y cómodo que no apriete, como unos buenos zuecos sanitarios. Lo mejor es utilizar un calzado flexible que se adapte perfectamente a tus pies y a tu forma de caminar.
· Para lavar los pies mejor utiliza jabones suaves y agua templada.
· Sécate bien los pies cuando salgas de la ducha sobre todo seca muy bien la zona entre los dedos.
· Después del baño puedes utilizar cualquier crema hidratante para tus pies.
Es aconsejable en muchos casos acudir al dermatólogo o al podólogo para realizar los oportunos tratamientos o al traumatólogo si los problemas son más graves.
En eSalúdate disponemos de una amplia gama de zuecos sanitarios originales o zuecos con cuña ideales para tareas que requieran estar mucho tiempo de pie permitiendo una mayor comodidad para realizar tu trabajo.
